Los exámenes toxicológicos de Matthew Perry, el actor que interpretó a Chandler Bing en la serie de televisión «Friends», han descartado la posibilidad de una sobredosis de fentanilo o metanfetamina como causa de su muerte.
Según fuentes policiales citadas por TMZ, los investigadores realizaron una prueba exhaustiva a Perry que reveló que no tenía rastros de estas drogas ilegales en su sistema. Esto incluye la mayoría de los narcóticos más habituales o recetados que pudiera consumir una persona. Sin embargo, aún se están realizando más pruebas para determinar si había alguna otra droga ilegal en el cuerpo del actor, así como para comprobar si los niveles de sus medicamentos recetados eran los adecuados.
Los resultados de estas pruebas tardarán entre cuatro y seis meses en estar disponibles. Una vez que se completen, el médico forense del condado de Los Ángeles determinará la causa y forma de muerte de Perry.
Como informó TMZ en su momento, los medicamentos recetados que se encontraron en la casa de Perry fueron prescritos por un médico para tratar sus diversas dolencias. Estas medicinas estaban almacenadas en botellas especiales, lo que sugiere que el actor los tomaba de forma responsable.
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Mientras tanto, un miembro de recuperación de Alcohólicos Anónimos comentó que el actor no estaba bebiendo, por lo que, estaba sobrio al momento de su muerte. Más bien, en los últimos meses el actor se había concentrado en ayudar a otros a superar sus adicciones.
Cabe recordar que la División de Homicidios y Robo del Departamento de Policía de Los Ángeles está investigando la muerte de Perry. Esta división se encarga de investigar los casos de muertes violentas, pero también puede intervenir en casos de muertes sospechosas.
El sábado Matthew Perry jugó pickleball durante horas en el Riviera Country Club. Posteriormente, se dirigió a su casa donde más tarde encontraron su cuerpo sin vida en el jacuzzi.
Matt Manasse, entrenador de Matthew Perry, comentó que gracias al pickleball el actor había encontrado un estilo de vida saludable. «Le encantaba. Venía cinco veces por semana, siempre hablaba de ello. Mejoró mucho, siempre hacía reír a todo el mundo».
Personas cercanas a Perry han dicho que se encontraba en un momento muy positivo de su vida. Estaba lleno de energía y entusiasmo por volver al trabajo, después de haberse comprometido a protagonizar una película y desarrollar ideas para series de televisión.
