Iñaki Urdangain, marido de la infanta Cristina y cuñado del rey Felipe VI, fue liberado este jueves tras ser sometido a cinco años y diez meses de prisión por los delitos de malversación, prevaricación, fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico influencias que no le evitó entrar a prisión.
El esposo de Cristina, fue liberado a las 08:58 de la mañana, de la cárcel Brieva (Ávila) y luego fue reconocido en el hogar Don Orione de Pozuelo que se dedica desde 1967 atender a personas con discapacidad intelectual, este centro le fue asignado como labor social luego de su liberación.
Esta liberación repentina, se ha vuelto polémica en España, generando confusiones sobre este procedimiento penitenciario que no todos los privados de libertad obtienen estos beneficios de convertirse en voluntarios sociales.
Por lo tanto el magistrado argumenta su decisión al amparo del artículo 117 del Reglamento penitenciario que permite a los reclusos en segundo grado con “baja peligrosidad social” “acudir regularmente a una institución exterior para la realización de un programa concreto de atención especializada, siempre que este sea necesario para su tratamiento y reinserción social” y que no se adviertan riesgos de quebrantamiento de condena. Este artículo se ha aplicado en los seis primeros meses de 2019 a 263 reclusos, según fuentes penitenciarias.
El director de la fundación asegura que Iñaki ha mantenido un comportamiento tranquilo y agradable y le proporcionó un uniforme para los días que vuelva a realizar el trabajo social.
Iñaki, repetirá estas salidas de ocho horas diarias dos veces a la semana después de que el juez de Vigilancia Penitenciaria 1 de Castilla y León, Florencio de Marcos, las autorizase este martes.