No tiene ni tres días en el cargo y el nuevo primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson ya fue acusado por el canciller de Irlanda, Simon Coveney, quien dijo que el sucesor de Theresa May quiere llevar a Inglaterra a un "enfrentamiento" con la Unión Europea por las negociaciones del Brexit.
Durante su primer discurso ante los diputados británicos el jueves, Johnson pidió a la UE un nuevo acuerdo, diferente al alcanzado entre la ex primer ministra Theresa May y la UE, rechazado tres veces por los diputados, según el diario En Mayúsculas.
Johnson reclamó en particular 'la abolición de la salvaguarda' irlandesa, una solicitud considerada 'inaceptable' por el negociador de la UE, Michel Barnier.
La salvaguarda es una disposición clave del acuerdo de retiro, destinada a evitar la reimposición de controles en la frontera entre la provincia británica de Irlanda del Norte y su vecina la República de Irlanda tras el Brexit.
'Hay que esperar a ver si el mensaje de Londres va a cambiar', declaró Coveney a la RTE.