El subdirector de El Mundo, Esteban Urreiztieta, analizó el escenario del rey emérito de España, Juan Carlos, después de que informara que abandorá el país. El monarca no aclaró su destino, ni cuando dejaría la Casa Real, pero sucede después de que se ventilase un aparente caso de corrupción con dinero procedente de Arabia Saudita.
Urreiztieta indicó que el monarca tomó una decisión adoptada en estos complejos momentos, pero dejó la puerta entreabierta para su regreso. “En ninguno momento aludió a un exilio”, explicó, destacando que los asesores de Juan Carlos I niegan que esa sea una posibilidad real.
En consecuencia, sería una partida momentánea mientras soluciona su panorama judicial, después de que se descubrieran unos ingresos percibidos por el monarca. Millones de dólares de Arabia Saudita ingresaron a su billetera en el 2008, pero nunca los declaró ante la Fiscalía española y cuatro años después los envió a una cuenta en las islas Bahamas.
“Por tanto lo plantean como una situación temporal, ligada con toda seguridad al procedimiento judicial en el que se encuentra inmerso. Es que los asesores jurídicos y los abogados de Juan Carlos pintan un panorama mucho más favorable del que pueda parecer en un principio”, expuso el periodista.
Juan Carlos I, un monarca “inviolable”
La defensa del Borbón alegará que el delito fue prescrito, puesto que en ese momento era “inviolable”. Es decir, la justicia no puede arremeter en su contra; en ese momento no cometió explícitamente una acción que lo pueda llevar a los tribunales.
“El delito fiscal que cometió es absolutamente inaceptable: recibió 65 millones de euros de la monarquía saudí que nunca declaró, estarían prescritos. Además se recibieron en una época en la que él era inviolable y no tendría, por esa misma condición, ninguna responsabilidad tributaria o administrativa”, explicó Urreiztieta.
Este es el futuro que dibuja la defensa de Juan Carlos I, por lo que podría regresar si se sientan estas bases ante los jueces. Sin embargo, este escenario podría generar varias nuevas revelaciones y movimientos de una de las figuras claves del caso: su examante Corinna Larsen.
El Tribunal Supremo de España presentó en junio una investigación, proveniente de unas declaraciones de Larsen. Unas supuestas grabaciones atribuidas a la examante del monarca aseguraban que Juan Carlos cobró una comisión por la concesión a Arabia Saudita de un contrato de alta velocidad ferroviaria.