Un terremoto de magnitud 7,1 sacudió la noche de este viernes la región sur de California, despertando el temor de que suceda el "Big One", que podría dejar alrededor de 38 millones de personas afectadas.
California es propensa a los terremotos, puesto que se ubica sobre una serie de fallas, es decir, partes donde las placas tectónicas se unen.
La falla más peligrosa
De todas estas placas tectónicas que se unen, la que hace temer a la región es la falla de San Andrés, la mayor de ellas y, posiblemente, la más peligrosa.
La falla de San Andrés atraviesa el Estado de norte a sur y se extiende a lo largo de 1.300 kilómetros.
Las fallas ocurren cuando las rocas en ambos lados se empujan o se deslizan una sobre la otra, desplazando la corteza terrestre.
Durante los sismos de esta semana no ocurrieron en esa falla, pero su cercanía elevó las preocupaciones.
Sobre ella están los enormes centros urbanos de Los Ángeles, la segunda ciudad más poblada de EEUU, y San Diego, y 38 millones de personas que viven en sus proximidades.
Más de 3000 muertos dejó la parte media de la falla, hace unos 160 años
Hace unos 160 años la parte media de la falla se rompió y la parte norte en 1906. En 1906 provocó el terremoto de 7,8 grados que destruyó gran parte de San Francisco en 1906 y dejó más de 3.000 muertos, siendo el más mortal en la historia de los Estados Unidos.
La selección sur de la falla es la que despierta preocupación y temor en los científicos. En ella no se ha producido un sismo durante 300 años.
Sin embargo, los registros geológicos indican que es la causante de un gran terremoto con una periodicidad de unos 150 años, y en todo ese tiempo ha ido acumulando tensión.
En el 2016, durante la Conferencia Nacional de Terremotos celebrada en California, los científicos que participaron advirtieron que la sección sur de la falla de San Andrés está "cargada y lista" para provocar un gran terremoto.
Susan Hough, del Servicio Geológico de Estados Unidos, mencionó que “para un terremoto de tal magnitud se esperan muchos temblores secundarios” y enfatizó el hecho de que en cualquier sismo de ese tipo “hay un 5% de posibilidades de que algo aún más grande suceda en los próximos tres días”.
La simulación de lo que sería el desastre catastrófico
Sismólogos de Estados Unidos simularon los efectos de un gran terremoto en California para un programa de estudio.
Uno de los modelos de computadora asume que el próximo gran evento en la falla de San Andrés será de magnitud 7,8, que iniciará una ruptura en el sur de California cerca del Mar Salton y luego se disparará hacia el norte a lo largo de la falla para golpear a Los Ángeles.
Los cálculos, muy conservadores, apunta que, de suceder esta falla, cerca de 2.000 personas morirían y habría más de 50.000 heridos.
Los edificios y las construcciones tendrían que ser abandonadas y los daños materiales superarían los $200.000 millones.
Mientras tanto, los ciudadanos se preguntan ¿está más cerca el "Big One"? Obteniendo respuesta de lo que sucedería, pero sin saber cuándo será.