El diputado a la Asamblea Nacional (AN), Timoteo Zambrano, le aseguró al senador de Estados Unidos, Marco Rubio, que la intención de los partidos minoritarios que están en conversaciones con el régimen de Nicolás Maduro es designar un nuevo Consejo Nacional Electoral “apegado a la Constitución y avalado por las partes en conflicto”.
A través de su cuenta en la red social Twitter, Zambrano destacó que están «comprometidos» en lograr unas elecciones “que nos conduzcan a un cambio político”.
Senador @marcorubio, entendemos que su posición siempre ha respondido a sus intereses electorales en Florida y no a la resolución pacifica del conflicto venezolano. Claramente nuestro objetivo son elecciones transparentes, justas y con observación internacional. 1/2 https://t.co/IcQW6MwLFD
— Timoteo Zambrano (@TimoteoZambrano) 18 de septiembre de 2019
Asimismo, le dijo a Rubio que según él, sus intereses con “electorales en Florida y no a la resolución pacífica del conflicto venezolano”.
Nuestra propuesta para designar un nuevo CNE desde la Asamblea Nacional, apegado a nuestra constitución y avalado por las partes en conflicto, apunta a esas elecciones que nos conduzcan al cambio político. 2/2
— Timoteo Zambrano (@TimoteoZambrano) 18 de septiembre de 2019
Más temprano, el senador norteamericano rechazó esa “unión” entre esos partidos minoritarios y el régimen. Destacó que es una táctica típica “empleada por las dictaduras.
Typical tactic employed by dictatorships is anointing of an “official opposition”.
The bottom line?
The only measures that will make U.S. sanctions & pressure against #MaduroRegime go away are free,fair& internationally verified elections in #Venezuela. https://t.co/T447pE3qV2
— Marco Rubio (@marcorubio) 18 de septiembre de 2019
En ese sentido señaló que la única forma que desaparezcan las sanciones de los Estados Unidos contra el régimen de Nicolás Maduro son “las elecciones libres, justas y verificadas internacionalmente en Venezuela”.
A principios de semana se conoció que estas filas minoritarias mantienen reuniones con la administración de Maduro donde produjeron algunos “acuerdos”, entre ellos que los diputados pertenecientes al Partido Socialista Unidos de Venezuela (Psuv), regresen a la Asamblea Nacional, único poder legítimo en Venezuela.
Además, supuestamente también conversaron sobre la liberación de algunos presos políticos. La primera que se produjo fue la del primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Edgar Zambrano; sin embargo el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, destacó que su liberación fue producto de la presión ciudadana y el informe de la alta comisionada para los derechos humanos de la ONU, Michelle Bachelet, que no se trataba de una “gentileza del régimen”.