Gardenia Castillo, una mujer de la tercera edad, salió este lunes de su casa para cobrar la pensión, aún sabiendo que ese dinero no le alcanza “ni para comprar un cartón de huevos”. Ella no logró tener en sus manos los ansiados 40.000 bolívares en efectivo, solo consiguió que le pagaran la mitad y no sabe qué podrá comprar con eso.
“¡Vengo por no dejar!” dijo Gardenia a Caraota Digital, aseguró que sobrevive haciendo “milagritos”, vende hielo y helados en su casa para poder obtener algo de dinero para “medio comer” durante el mes, porque su pensión no le es suficiente.
Ella no come carne ni pollo porque “es un lujo” para su bolsillo, cuando logra comer esa clase de proteínas es porque a su hija le venden en su trabajo “un combito”, pero de resto le es casi imposible.
Por su parte, la señora Luz Mendez, una enfermera jubilada, acudió este lunes al banco a cobrar la mitad de su pensión de vejez que le alcanza para cubrir “solamente pasaje”; de resto, se sustenta porque sus hijos la ayudan. Pero aún así, ha perdido alrededor de 10 kilos.
Juana González, otra abuela, aseguró que los 20.000 bolívares que iba a cobrar este lunes no le alcanzarían “ni para un kilo de yuca”, y agregó que sobrevive porque sus hijos la ayudan.
El escenario no es diferente para Omaira Bolívar, jubilada del Ministerio de Educación, ella detalló que los 40.000 bolívares de pensión solo le alcanzan para comprar “pan y una harina” de maíz.
Omaira come carne cuando puede comprar “un combo de 7.000 bolívares”, pero en medio de su necesidad, acude a casa de una sobrina para poder alimentarse durante el mes.
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