El Gobierno interino presidido por el presidente encargado Juan Guaidó, informó este viernes que en las próximas horas arribaran a Venezuela representantes de Noruega, sin una agenda previa.
De acuerdo al comunicado, la intención de su visita era conocer la situación actual de Venezuela desde el punto de vista político y humanitario.
«Comunicamos al país esta información en aras de mantener la transparencia, principal bandera de nuestra gestión de cara a Venezuela», rezó la misiva.
En ese sentido, como lo anunció Caraota Digital en exclusiva; reiteraron que el proceso de mediación, que realizó el Reino de Noruega, finalizó el pasado año cuando el régimen «se negó a que se celebren elecciones presidenciales y parlamentarias libres y justas».
Asimismo, el Gobierno interino precisó que no existía, en este momento, ningún proceso de negociación con el régimen de Nicolás Maduro.
Por último, manifestó que le recordaron a la delegación noruega que solo elecciones libres y justas eran la solución a la crisis y no «procesos fraudulentos» con un cuestionado Consejo Nacional Electoral (CNE).
Noruega y Venezuela: proceso de Oslo
Guaidó anunció el pasado septiembre de 2019 su retirada del proceso auspiciado por Noruega, un mes y medio después de que lo hiciera el régimen.
Maduro suspendió en agosto las negociaciones que tenían lugar en Barbados porque «Guaidó celebra, promueve y apoya» las sanciones del Gobierno de Estados Unidos contra funcionarios del régimen.
A principios de septiembre, Maduro puso como condición para retomar las negociaciones que Guaidó rectificara su supuesta «pretensión de entregar» el Esequibo; un extenso territorio que Guyana y Venezuela disputan y que supone dos terceras partes del primer país, reseñó la agencia de noticias EFE.
Entre septiembre de 2017 y enero de 2018, el régimen y la oposición se sentaron a la mesa de diálogo en República Dominicana. No obstante, las conversaciones no dieron resultado y Maduro terminó convocando unas elecciones a las que compareció casi en solitario. Además, no han sido reconocidas por buena parte de la comunidad internacional por «fraudulentas».