Una explosión ocurrida en una vivienda comparable con un temblor, según los propios vecinos, dejó un saldo de tres fallecidos y un herido en el sector Pueblo Arriba, parroquia Naiguatá.
El lamentable suceso se produjo el miércoles 19 de junio, día del Santísimo Sacramento, que es venerado por todo el pueblo.
Según Félix Corro, tío de dos de las víctimas, el estallido ocurrió cuando reparaban un aire acondicionado en la referida vivienda. Al parecer, el técnico Luis Moreno, de 61 años y único sobreviviente, junto a su ayudante le habría aplicado gas doméstico al aire.
Aunque aclaró que no estuvo en la zona ese día, "dicen que la explosión se dio porque mezclaron gas doméstico con nitrógeno. Al parecer, ahora usan el gas y lo meten en la bombona de nitrógeno. No sé si lo enfrían. Comentan que como el gas huele se le echa un componente para que no salga ese olor. Mi sobrino y su hija estaban junto a los técnicos en la habitación donde reparaban el aire".
El estruendo del estallido fue tal que se escuchó a un kilómetro del inmueble. Todo el pueblo lo sintió.
Las víctimas respondían a los nombres de Alí Corro , apodado Nacho, de 46 años; Yaneisi Corro, de 20 años y con siete meses de embarazo; y Marcos Rodríguez, ayudante del técnico. Todos presentaron quemaduras en 80 % de su cuerpo. "Primero murió Marcos, luego Yaneisi y Nacho, el propio 24 de junio, Día de San Juan".
La familia Corro, que custodia la imagen de San Juan Bautista en la parroquia, está doblemente afectada porque esta tragedia los tocó el mismo día en que veneran al santo. "La celebración estuvo opaca y la protagonizaron gente de afuera, no los naiguatareños".
La tarde de este martes arribaron los cuerpos de los Corro al pueblo, que se llenó de gente conmocionada por la tragedia. En medio de cánticos religiosos, fueron llevados hasta su última morada escoltados por sus vecinos, quienes colmaron las calles de la parroquia en medio del dolor y la tristeza.