Algunos gatos son sumamente traviesos y pueden llegar a causar desastres en nuestras casas. Especialistas indican que estos son indicios de que se trata de un animal malcriado y hay varias características para identificarlos.
Los gatos pueden actuar de muchas maneras y, cuando es malcriado, se considera que se trata de un problema de conducta. Aunque los gatos suelen tener cierto grado de rebeldía, hay algunos que pueden ir un paso más allá.
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Aunque los gatos estén domesticados y tengan un buen vínculo con los humanos, tienen un fuerte instinto de supervivencia. En tal sentido, no todos actuarán como se espera.
¿MI GATO ES MALCRIADO?
- Juego frenético: esta es una de las principales características de los gatos malcriados. Suelen ser muy inquietos y sacarán toda su energía con sus juguetes. En las noches, también tendrán mucha actividad.
- Conducta destructiva: otra de las características es que el gato destruye fácilmente sus juguetes y otros objetos de la casa. En tal sentido, se trata de gatos que siguen su instinto y son más difíciles de educar.
- Muerde muebles o ropa: los gatos malcriados suelen destruir o rasgar cosas, incluso en el proceso de aprendizaje. Por tanto, destruirán las esquinas de muebles, de cortinas y la ropa de sus dueños, dado que no se le aclararon los límites a tiempo.
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- Rasga mucho: una de las principales características de los gatos malcriados es esta. No solo rasguñan zapatos o ropa, sino que también dejan marcas en los muebles y pueden llegar a hacer daño a sus dueños.
- Muy controlador: los dueños sabrán si sus gatos son malcriados porque sentirán que son controladores. Es decir, que su mascota los manipula para obtener un plato extra de comida o alguna otra cosa que deseen.
