Debido a la expansión del COVID-19 y la orden de confinamiento, muchas profesiones y prácticas en el mundo se han visto obligadas a cambiarse a plataformas digitales y las religiones no escapan de esa realidad. Mientras que en el catolicismo los creyentes están asistiendo a misas online, en la santería los religiosos están haciendo consultas y trabajos a través de medios digitales para seguir rindiendo honor a sus santos.
Israel Quintero tiene al menos 3 décadas en la religión Yoruba y nos comentó que a raíz del confinamiento las personas han preferido gastar el dinero en comida sin embargo señaló que aún muchos religiosos continúan realizándose sus consultas y haciendo trabajos a través de WhatsApp, notas de voz y video llamadas.
Durante las consultas de santería los religiosos dicen interactuar con fuerzas y energías espirituales limpiando y protegiendo a la persona, pero estas prácticas tampoco escapan de la situación económica; para realizarlas cumplir con todas las exigencias se requiere de una inversión que compromete al bolsillo de quienes deseen formar parte de la religión
‘’Los grupos delictivos buscan protección en la santería dejando a un lado que la religión no es un chaleco antibalas y la espiritualidad no te hace dejar de ser un ser humano’’
Durante la entrevista Israel aprovecho para comentar que ante el creciente aumento de los grupos criminales en el país, muchos de ellos han buscado protección en la santería dejando a un lado que la espiritualidad no es un chaleco antibalas.
En medio de una coyuntura tan difícil como la atraviesa Venezuela debido a una grave crisis humanitaria sumada a la creciente expansión de una pandemia, las personas buscan a través de cualquier medio apegarse a sus creencias para buscar alivio ante tanta adversidad.
En un país donde nueve de cada diez personas dice ser católica, la santería y el espiritismo abarcan cada vez más seguidores.
Las consultas de la Santería se realizan a través del oráculo de IFA siendo este el que posee mayor exactitud y precisión y los seguidores a través de distintos rituales piden por el beneficio propio y del mundo.
A pesar de que en Venezuela sigue predominando la creencia católica, cada vez son más las personas que se inclinan hacia otras religiones como la santería con el objetivo de encontrar protección y alcanzar la salud en medio de la expansión del COVID-19 y los distintos problemas que enfrenta la humanidad.