Griselda Colina y León Arismendi, rectores suplentes del Consejo Nacional Electoral (CNE) entre el 2021 y el 2023, dijeron que la inesperada “renuncia” de los rectores cercanos al chavismo busca “torpedear” el avance a un equilibrio en el Poder Electoral.
Colina aseguró que la Asamblea Nacional electa en 2020 “decidió ponerle fin anticipado” a la directiva del CNE. También aseguró que la renuncia de los rectores cercanos al chavismo no fue más que una “excusa”.
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“Todo indica que lo que se pretende, con tal arbitrariedad, es torpedear la posibilidad de que el país continúe avanzando en la construcción de una institucionalidad equilibrada del órgano electoral”, indicó Colina.
En ese sentido, aseguró que “en esa dirección” apunta la conformación del Comité de Postulaciones Electorales. “Lo mismo que la inhabilitación de posibles candidatos presidenciales”, acotó Colina.
POSTULADOS DE NUEVO
De igual forma, Griselda Colina aclaró que organizaciones de la sociedad civil los postularon nuevamente para formar parte del CNE. Aunque no ha presentado su renuncia, confirmó que buscará integrar la próxima directiva.
“La referida medida de la AN constituye una remoción de hecho. Frente a este panorama, ratificamos nuestro compromiso con la recuperación del derecho a elegir, ahora desde la acción ciudadana”, acotaron.
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Ambos rectores subrayaron que ocurrió una “remoción de hecho”, dado que nunca presentaron su renuncia. En tal sentido, afirmaron que hubo un “desmantelamiento” de la directiva del CNE.
Colina y Arismendi concluyeron que “es necesario redoblar los esfuerzos para fortalecer el camino de la recuperación del derecho a elegir”. También llamaron a “exigir que cualquier diálogo mantenga en su norte la institucionalidad, el Estado de derecho y la democracia”.
