El Ayuntamiento de Roma anunció una nueva medida para proteger el patrimonio y que consiste en sancionar con 150 euros a quienes se sienten en las escaleras de la Plaza de España.
Estas escaleras se han convertido en un punto de referencia donde la mayoría de los turistas se sientan a descansar o admirar la zona, pero estos días se ve completamente desierta, tal y como recogen algunos medios locales.
La normativa también se aplica a otros monumentos, reseñó DPA.
Ya hace unos meses que el consistorio romano comenzó a sancionar por comer y beber en monumentos.
Las sanciones pasan desde los 150 euros por sentarse en un monumento hasta los 400 euros si se considera que se ha dañado el patrimonio y será interpuestas por agentes de policía encargados de vigilar estas zonas turísticas.