Al menos tres buques fletados por compañías poco conocidas emplearon documentos falsos para transportar petróleo venezolano, mientras se mantienen algunas sanciones en contra de la industria de hidrocarburos de Venezuela.
El superpetrolero Young Yong zarpó del puerto chino de Qingdao en septiembre y contaba con certificados que indicaban que cargaba crudo de Malasia. Sin embargo, fotos satelitales mostraron que el buque estaba en Venezuela hace cuatro meses.
La agencia de noticias Reuters identificó que Young Yong es uno de los tres buques que usaron documentos falsos para exportar petróleo venezolano. De tal forma, estas empresas buscaban ocultar la procedencia del crudo.
El Young Yong y otro buque fueron señalados este mes por Estados Unidos por incumplir las sanciones implementadas en contra de Irán. No se conoce si las autoridades estadounidenses investigan al otro barco.
DESCONFÍAN DE CERTIFICADOS DE PETRÓLEO
Seis especialistas de transporte marítimo y comercio de petróleo alertaron de los riesgos del cumplimiento de las sanciones para las empresas. En tal sentido, puntualizan que hay una proliferación de documentos falsos.
«Ahora está quedando claro que no se puede confiar en los certificados de origen, incluso cuando vienen con documentación oficial del gobierno», dijo Cari Stinebower, del bufete de abogados Winston & Strawn.
Christian M. Ingerslev, director ejecutivo de Maersk Tankers, sostuvo que la alta cantidad de sanciones provocó “flotas separadas y que mercados funcionaran en paralelo”. Por tanto, hay buques de petróleo que operan fuera del radar con certificados falsos.
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El corredor de barcos Braemar PLC estimó que Irán y Venezuela tienen una flota de 200 buques de carga de petróleo, a pesar de las sanciones. Al menos 82 de ellos son superpetroleros, los cuales pueden llegar a cargar hasta dos millones de barriles.
Mientras tanto, Estados Unidos considera suavizar las sanciones a la administración Maduro, pero si se conceden garantías democráticas.
