Marina Landino, una tiktoker venezolana de 28 años, presumía sus éxitos en las redes sociales. No obstante, se trataba de una mujer que estaba solicitada por las autoridades por sus vínculos con una peligrosa banda criminal de Venezuela.
La joven aparentaba ser una empresaria exitosa y coach de bienestar. Sus cuentas de TikTok e Instagram contaba con miles de seguidores y dejaban constancia de su vida como amante de la vida fitness.
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Se promocionaba como emprendedora, dueña de un centro estético y de tres restaurantes de comida saludable en Perú. Mientras tanto, una solicitud de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) pesaba sobre los hombros de Landino.
El portal de noticias Infobae indicó que las redes sociales de Marina estaban llenas de lujo. Se le podía ver con elegantes vestidos, joyas, relojes de oro, finas carteras y un iPhone de última generación.
EL SECRETO DE LANDINO
La Policía de Seguridad del Estado en una oficina de Migraciones en la ciudad peruana de Chiclayo detuvo a Landino la semana pasada, cuando intentó hacer unos trámites personales.
Las autoridades identificaron a Landino, quien era buscada desde hace cuatro años por la Interpol. Presuntamente, participó en importantes robos en Venezuela y luego ingresó a Perú de forma irregular.
«Soy inocente, ¿qué quieren que les diga? Tengo dos empresas acá. Soy trabajadora y estudiante», dijo Landino a un reportero local. Sin embargo, confesó a las autoridades que conoció a peligrosos criminales.
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Landino era conocida como Zuliana y, aparentemente, formó parte de una banda criminal dedicada a asaltos en Venezuela. Cuenta con procesos abiertos por los delitos de robo a mano armada y asociación ilícita para delinquir.
Las autoridades peruanas ordenaron una privativa de libertad preventiva de nueve meses. Ahora, se espera que la justicia venezolana haga los trámites correspondientes para ejecutar su extradición.
